En este documento se presentan las buenas prácticas para ayudar a los actores humanitarios a diseñar e implementar programas de asistencia en efectivo, que incluye las transferencias monetarias multipropósito (TMM) y la asistencia en efectivo para obtener resultados sectoriales. La elaboración de este documento se basó en el creciente desafío de la inflación y la depreciación de la moneda en contextos en los que se está implementando o podría implementarse la asistencia humanitaria en efectivo. La necesidad de documentar las prácticas actuales ha sido evidenciada por la COVID-19, que no solo ha exacerbado la volatilidad económica en muchos contextos humanitarios, sino que también ha aumentado las necesidades humanitarias. Esta es un área de aprendizaje constante; por lo tanto, esta es una recopilación de las buenas prácticas hasta la fecha por lo que el documento deberá actualizarse periódicamente.